domingo, 3 de julio de 2016

El poder y las creencias

Como borregos seguimos
aunque mucho nos creamos.
Solo a un dios venera el Mundo,
aunque de Dios casi huyamos.


Si bien al opio del pueblo
como llamaran antaño
casi se creyó vencido,
el opio cambió de manos.

No es Dios o las religiones
quienes nos crean ataduras.
Es el poder camuflado
con distintas vestiduras.

El espíritu del hombre
necesita crecimiento
y es la paz y tolerancia
para él su mejor remedio.

Sin embargo es el poder
el único interesado
en que los hombres ignoren
si existe o no el pecado.

Supersticiones, creencias
que arrastramos tantos siglos
siempre fueron divulgadas
en beneficio del mismo.

Que el pueblo no sea culto
y no piense por sí mismo
y aunque estudie siga siendo
esclavo de algunos listos.

No olvidemos que si un pobre
algún día se hace rico
olvidará de repente
cuáles fueron sus inicios.

Y por eso en esta vida
sin que tenga solución
se repiten los errores
sin que quepa discusión.

                                    Leonor Cuevas Martín

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¿Te ha gustado esta entrada? Deja tu comentario indicando solo tu nombre en NOMBRE/URL del desplegable:

Entradas populares